Hace más de tres décadas, mis padres biológicos dieron positivo en la prueba del VIH (virus de inmunodeficiencia humana) y se les diagnosticó SIDA a finales de los 80 y mediados de los 90. La muerte de mi padre se produjo primero en 1989, seguida de la muerte de mi madre en 1994, solo dos años antes de que se lograran avances hacia tratamientos verdaderamente efectivos en 1996. Todos los días, ...Lee mas